Vinicius al banquillo: ¿Decisión táctica o mensaje de Xabi Alonso?
La suplencia de Vinicius Junior en el debut del Real Madrid en la Champions League ante el Marsella ha generado sorpresa y debate en el mundo del fútbol. Xabi Alonso, técnico del conjunto blanco, optó por alinear a Rodrygo en lugar del brasileño, relegando a Vinicius al banquillo. Esta decisión, la segunda suplencia del brasileño en apenas cinco partidos, plantea interrogantes sobre su rol en el equipo y la confianza del entrenador.
¿Mérito o Advertencia?
Alonso ha destacado la meritocracia como uno de los pilares de su gestión. En la previa del partido, el técnico elogió el trabajo de Vinicius, pero no garantizó su titularidad. "He hablado con él e hizo un gran trabajo con un jugador menos el sábado. No eran los mejores momentos para un jugador de ataque, pero se sacrificó. Fue una victoria de equipo. Le he visto bien y está con buena energía para mañana", comentó Alonso. Sin embargo, estas palabras no se tradujeron en una plaza en el once inicial.
El peso de la Champions
La Champions League es una competición especial para Vinicius, donde ha brillado con luz propia. Sus 29 goles en el torneo lo colocan cerca de figuras históricas como Kaká. Sin embargo, el estatus de intocable del brasileño parece tambalearse bajo las órdenes de Xabi Alonso. La última vez que Vinicius no fue titular en Liga estando disponible fue el 21 de septiembre de 2024, también ante el Espanyol, y curiosamente, Rodrygo ocupó su lugar.
El Marsella busca Renacer
El Marsella, un histórico del fútbol francés y campeón de la Champions League en 1993, llega al Bernabéu con la ilusión de recuperar su grandeza. Tras años de dominio del PSG, el equipo francés, ahora dirigido por Roberto de Zerbi, busca dar la sorpresa en el feudo madridista. El Marsella ha realizado once fichajes para afrontar esta temporada con ambición y aspirar a competir en Europa.
Un pasado turbulento
El Marsella, si bien campeón de Europa, carga con un pasado turbulento marcado por el escándalo de amaño de partidos que empañó su título de 1993. Aquel incidente, liderado por el entonces presidente Bernard Tapie, resultó en la pérdida de la liga francesa y la prohibición de participar en competiciones internacionales. Hoy, el club busca dejar atrás esos fantasmas y construir un futuro prometedor.