¡Accidente en Masterchef! Chango y Mirol al borde del desastre (y el pulgar arriba)
La nueva temporada de Masterchef Celebrity Argentina arrancó con todo, pero no de la manera que los participantes esperaban. Andy Chango y Esteban Mirol protagonizaron los primeros incidentes en la cocina más famosa del país, demostrando que el arte culinario, a veces, puede ser peligroso.
Un debut accidentado
El lunes 13 de octubre, los reflectores se encendieron para dar inicio a una nueva edición del reality show de Telefe, conducido por Wanda Nara y con el implacable jurado compuesto por Damián Betular, Germán Martitegui y Donato De Santis. La presión era palpable, y la consigna clara: demostrar quién tiene la sazón de campeón.
Sin embargo, para Andy Chango y Esteban Mirol, la noche no fue precisamente un camino de rosas. El desafío consistía en preparar un lomo al champignon, un plato que, a priori, no parecía representar mayores complicaciones. El problema surgió cuando tuvieron que enfrentarse a la temida mandolina, un utensilio que, según confesó Chango, nunca había logrado dominar.
Sangre, sudor y... ¿lomo al champignon?
La advertencia de Donato fue clara: debían familiarizarse con la mandolina para lograr el corte perfecto de las papas. Pero la familiarización terminó en un corte, y no precisamente de papas. Andy Chango sufrió un pequeño accidente al cortarse un dedo, lo que lo obligó a abandonar momentáneamente la estación de trabajo. La solidaridad no tardó en aparecer, y Miguel Ángel Rodríguez se ofreció a ayudar a Mirol, quien se encontraba solo y con la presión del tiempo.
Sin embargo, el orgullo y la determinación de Mirol prevalecieron, rechazando la ayuda de Rodríguez. La tensión se palpaba en el aire, y la frase de Rodríguez "No vine a ayudar, te cagué la vida" reflejó el clima de competencia que se vive en Masterchef Celebrity.
El pulgar arriba, símbolo de la noche
A pesar de los contratiempos, Chango y Mirol lograron terminar su plato, aunque con algunas imperfecciones. La devolución del jurado fue aceptable, permitiéndoles subir al balcón y evitar la eliminación. "Estoy en una situación paradojal porque quiero que me trague la tierra, pero por prescripción médica tengo que tener el pulgar para arriba", bromeó Chango, resumiendo a la perfección la accidentada noche que vivieron.
La moraleja de la historia: en Masterchef Celebrity, hasta el más mínimo descuido puede costarte caro. Pero con humor, resiliencia y, quizás, un poco de suerte, se puede salir adelante, incluso con el pulgar arriba.