El Bayern Múnich continúa su marcha triunfal, sumando su 13ª victoria en 13 partidos oficiales. Esta vez, la víctima fue el Borussia Mönchengladbach, que cayó 3-0 en casa ante el poderío bávaro. Sin embargo, la victoria no estuvo exenta de dificultades, convirtiéndose en un verdadero "Schmerz-Sieg" (victoria dolorosa) para el equipo de Múnich.
Expulsión Temprana Marca el Partido
El encuentro se vio marcado desde el principio por una dura entrada de Jens Castrop sobre Luis Diaz. A los 18 minutos, Castrop propinó un planchazo a la altura de la espinilla a Diaz, lo que le valió la tarjeta roja directa. El propio Castrop reconoció la gravedad de la falta: "La sanción es justa. Viendo la imagen fija, la escena se ve muy mal. Afortunadamente, no le golpeé con mucha fuerza. Lo siento. Teníamos la intención de no retroceder en los duelos, pero así fue desafortunado".
Dominio Estéril y Destellos de Calidad
A pesar de jugar con un hombre más durante más de 70 minutos, el Bayern tardó en encontrar el camino al gol. A excepción de un remate de Diaz al inicio del partido, el equipo no generó grandes ocasiones de peligro. La superioridad numérica no se tradujo en un juego fluido y contundente.
Kimmich Abre el Marcador, Karl Sentencia el Partido
Fue Joshua Kimmich quien rompió el empate con un golazo desde fuera del área en el minuto 64. Guerreiro amplió la ventaja poco después, aprovechando una gran jugada de Olise (69'). El joven Lennart Karl, que ya había brillado en el partido de Champions League contra el Brujas, selló la victoria con un espectacular gol de larga distancia (81'). El joven maravilla de 17 años sigue dando que hablar.
Susto en el Área Bávara
El Mönchengladbach tuvo la oportunidad de recortar distancias con un penalti cometido por Bischof sobre Diks. Sin embargo, Stöger estrelló el balón en el poste izquierdo (75'), desaprovechando una valiosa oportunidad. Urbig, que sustituyó a Manuel Neuer, adivinó la trayectoria pero no llegó a tocar el balón.
Urbig Gana Experiencia
La presencia de Urbig en la portería del Bayern se debe a la necesidad de darle minutos de juego antes del enfrentamiento de Copa de Alemania contra el Colonia el próximo miércoles. El joven guardameta aprovechó la oportunidad para ganar experiencia en un partido exigente.