Deyverson: Banco Central intima a dueños del Atlético Mineiro por deuda
El caso de la deuda del Atlético Mineiro por el pase del delantero Deyverson ha escalado a niveles inesperados. El Banco Central de Brasil ha intimado a Rubens Menin y Ricardo Guimarães, controladores de la Sociedad Anónima de Fútbol (SAF) del club y propietarios del Banco Inter y Banco BMG respectivamente, a presentar su defensa ante una denuncia de incumplimiento de pago.
¿Cuál es el origen de la disputa?
Todo se remonta a la transferencia de Deyverson al Cuiabá. El club alega que el Atlético Mineiro adeuda R$ 5 millones (aproximadamente 1 millón de dólares) por esta operación. Según el Cuiabá, de las cinco cuotas acordadas, solo se abonó la primera. Ante la falta de pago, el Cuiabá activó una cláusula que obligaba al Atlético a pagar la totalidad de la deuda de forma inmediata, a lo que el club se negó, desatando el conflicto.
El Banco Central entra en escena
El Cuiabá fundamenta su denuncia en una resolución del Consejo Monetario Nacional que exige a los controladores de instituciones financieras mantener una capacidad económico-financiera compatible con las operaciones de las instituciones. Al ser Menin y Guimarães dueños de bancos y gestores de la SAF, podrían estar sujetos a estas regulaciones, ampliando el alcance del problema.
La respuesta del Atlético Mineiro
El Atlético Mineiro calificó la denuncia como "impropia" y acusó al Cuiabá de intentar cobrar valores indebidos. El club argumenta que la deuda no es legítima y se niega a pagar la totalidad de la suma exigida.
El Banco Inter, vinculado a Rubens Menin, podría solicitar una prórroga para presentar su defensa. La postura que adopte la institución financiera será clave para los próximos pasos de la disputa. El caso se encuentra en análisis en la Cámara Nacional de Resolución de Disputas (CNRD) de la CBF, y podría tener nuevos y significativos desarrollos.
Esta situación ha generado gran revuelo no solo en el ámbito deportivo, sino también en el financiero, poniendo en el ojo de la tormenta a los dueños del Atlético Mineiro.